Date: Mon, 10 Aug 2009 19:38:55 -0700 (PDT) From: Billy Billy Subject: TODO O NADA PARTE 48 Advertencia: Para poder leer esta historia deberás de tener la edad legal mínima requerida en el país o estado en donde vivas (como la edad legal mínima requerida no es la misma en todos los países e incluso en los estados de algunos países llega a variar, se considerará como edad legal mínima requerida la que marque la ley del lugar o jurisdicción en donde vivas). Este es un trabajo de ficción, tanto nombres, caracteres, lugares e incidencias son producto de la imaginación del autor y han sido usadas de forma ficticia, cualquier semejanza actual con personas vivas o muertas o con algún evento que haya pasado es mera coincidencia Billy49mx@yahoo.com.mx "TODO O NADA? PARTE 48 Por Billy Por supuesto que el castigo y las palabras de Alexander tuvieron el efecto deseado en los esclavos, adicionado al miedo que todos sentían al no saber en que forma iban a ser ejecutados, y después de lo que habían visto no les quedaba la menor duda de eso. Pasaron varios horas más y prácticamente todos los esclavos incluyendo a Warrioth fueron castigados por no mantener la posición que se les había ordenado antes de que el transporte llegara, y cuando lo vieron los esclavos sintieron un alivio muy grande, sin embargo Alexander todavía los obligó a estar en esa posición por un par de horas más castigando de nueva cuenta a prácticamente todos los esclavos por no mantener la posición hasta que por fin dio la orden que se pusieran de pie y trotaran hacia la parte trasera del camión y que subieran sin causar aglomeraciones. Nuevamente esa orden trajo consigo nuevos castigos para los esclavos, pero ahora con un látigo el cual estaba diseñado para marcar la piel y causar el máximo dolor posible pero sin dañarla en forma permanente, ya que el camión en su parte trasera al no tener una rampa para permitirle a los esclavos subir de forma rápida y continúa, hacía que al tener que trepar los que venían atrás se tuvieran que detener y con ello los guardias azotaran a los esclavos que estaban esperando subir al camión, ya que no se había obedecido la orden de Alexander en lo referente a que no debía de haber aglomeraciones, y esto trajo como consecuencia que los esclavos que recibían los azotes empujaran a los que estaban delante de ellos para evitar seguir siendo castigados, causando que varios de sus compañeros cayeran al piso en incluso los pisaran, por supuesto que los guardias aprovechaban todo eso para seguir castigando a los esclavos caídos ya que a latigazos se abrían paso hasta donde se encontraban, y a base de azotes hacían que se levantaran. Esto trajo como consecuencia que varios esclavos sufrieran algún tipo de lesión sobre todo en brazos y piernas, pero eso no le importó a los guardias los cuales disfrutaban dando azotes a diestra y siniestra. Cuando por fin todos los esclavos estuvieron en la caja de camión, este arrancó y se dirigió hacia una de las zonas más alejadas de la isla y que estaba prohibida para los esclavos, sin embargo se seleccionó una ruta la cual era a través del campo la cual no estaba pavimentada que hacía que el camión brincara cada vez que pasaba por un desnivel del terreno, lo cual era constante haciendo que los esclavos brincaran y se golpearan entre si al no tener en donde agarrarse, solo los que iban en las orilla podían sostenerse de las rejillas del camión, pero eso lo único que hacia era evitar que golpearan o cayeran encima de algún compañero. El trayecto fue largo y los golpes que se daban los esclavos entre ellos mismos por los brincos fueron constantes, y para cuando éste se detuvo la mayoría de los esclavos estaban completamente agotados y adoloridos. Inmediatamente se les dio la orden de que se bajaran y que formaran una hilera la cual debía de ir del esclavo que tuviera la verga más grande hasta que el que la tuviera más pequeña, eso como era de esperarse trajo confusión entre los esclavos ya que jamás se les ocurrió que se les diera una orden así para formar una fila, y al ver los guardias que los esclavos se quedaron completamente desorientados sin saber que hacer, aprovecharon para lanzarse sobre de ellos y golpearlos con los látigos provocando gritos de dolor, y de esa manera los esclavos empezaron a medir entre si el tamaños de sus miembros para empezarse a formar lo más rápidamente posible y evitar con ello el seguir siendo castigados. Por supuesto que al tener que medir los esclavos sus miembros viriles los unos con los otros para determinar cual era más grande, trajo las burlas de los guardianes y amos que los estaban observando trayendo consigo mayor humillación y desconcierto entre ellos, así como el ser castigados por no hacerlo tan rápido como los seres superiores lo deseaban. Cuando la hilera estuvo lista dos guardias y un amo revisaron que efectivamente los esclavos se hubieran formado conforme se les había ordenado, pero por supuesto volvieron a aprovechar la oportunidad de castigarlos si a alguno de los seres superiores le parecía que alguien la tenía más larga que el que estaba delante de él haciendo que se cambiaran de posición, para volver a ser castigados si otro ser superior consideraba que no era así y tenían de nueva cuenta que cambiarse. Cuando todo estuvo a satisfacción de los guardias y amos, la fila de esclavos los cuales como ya era costumbre estaban completamente desnudos empezó a avanzar, hasta que llegaron a una de las entradas que daba acceso a las instalaciones subterraneas, uno a uno entraron por la puerta y empezaron a descender por las escaleras hasta que llegaron al primer descanso en donde ya no pudieron continuar debido a que una puerta que estaba cerrada les impedía el paso, y uno de los guardias les dijo que para que la puerta se abriera tenían que pasar sus nalgas sobre el lector para que éste leyera la información del chip, y abriera la puerta una vez que hubiera validado la información la cual indicaba que ellos podían estar ahí, pero como era obvio cada esclavo tenía que pasar por ese procedimiento. Así que uno a uno tuvo poner entre la raja de sus nalgas la barra guía para después bajarlas con rapidez hasta que se encontraran con el tope, y de esa forma el dildo que contenía el lector se disparara para que los penetrara y quedaran inmovilizados hasta que la máquina retirara de su cuerpo el dildo y los dejara pasar. Por supuesto que esa penetración era muy humillante y dolorosa, pero como los esclavos no habían recibido la instrucción de poder hablar o quejarse lo máximo que se atrevían a hacer como sonido cuando eran penetrados era un gruñido, para posteriormente esperar a que el dolor fuera cediendo poco a poco, y también esperar a que el dildo fuera retirado de su cuerpo y que no hubiera habido ninguna equivocación en la información que se le había introducido a los chips, porque sabían que el lector los castigaría al estar en un lugar no autorizado golpeando sus testículos, y para fortuna de todos ese error no se presento. Los esclavos fueron encerrados en veinte celdas y por lo tanto había cinco esclavos muy apretados en cada una de ellas y para poderse acostar, tuvieron que estar unos encima de otros, una vez que todos estuvieron enjaulados se apagaron las luces para que descansaran y no les dieron de comer. Alexander se reunió con los amos y guardias que se iban a encargar de entrenar al primer grupo de esclavos, y después de analizar los expedientes de cada uno de ellos, y de fijar las medidas disciplinarias extraordinarias para en casos de rebeldía o el de no aprobar el entrenamiento, se concluyó en que los esclavos tenían una pésima condición física y que por lo tanto después de cada sesión de entrenamiento, se someterían a ejercicios extraordinarios encaminados al principio a fatigarlos y castigarlos para que se esforzaran al máximo y a la brevedad posible adquirieran la condición física que se necesitaba, aunque ese día sería al revés la cosa, primero se les sometería a los ejercicios y después al entrenamiento. Los esclavos fueron levantados muy temprano por la mañana y antes de alimentarlos los sacaron al campo en donde los obligaron a correr y hacer toda clase de ejercicios los cuales como era de esperarse los terminaron agotando, haciendo que muchos se echaran en el piso por lo mal que se estaban sintiendo trayendo consigo los azotes de los guardias en cuanto se recuperaban y se ponían de pie, además de que se les iba a mantener desnudos todo el tiempo que durara su entrenamiento a no ser que hubiera una situación extraordinaria, aunque para los esclavos eso ya no iba a ser ninguna novedad. El último ejercicio consistió en dar varias vueltas de carro hasta llegar a un río turbio en el cual se tenían que meter para refrescarse, y una vez que estuvieran afuera esperar en una sola fila en la posición de firmes hasta que el último de los esclavos hubiera salido del agua. Por supuesto que este ejercicio especial fue hecho muy lentamente por los cansados esclavos los cuales estaban sudorosos por el calor y la humedad de la isla además de hambrientos y sedientos, y los amos aprovecharon eso para castigarlos y causarles un terrible dolor utilizando los descargadores eléctricos, haciendo que cada vez que un esclavo era tocado se desplomara al piso y se retorciera de dolor moviendo sus extremidades sin control alguno por algunos segundos dejándolo indefenso, por supuesto que había varios niveles de intensidad, y en ese momento solo lo tenían a un cuarto de la misma. Al caer uno de los esclavos por haber recibido una descarga eléctrica después de haber salido del río y estar aún mojado mientras subía hasta la parte plana, hizo que se llevara consigo al que estaba delante de él y ese se llevó a otro, así que se oyeron dos gritos más de agonía al ser castigados los otros dos esclavos por no haber subido rápidamente, haciendo que los aterrorizados esclavos que venían detrás tuvieran o que pasar por encima de los cuerpos e incluso pisarlos o hacerlo por un lado, entonces Alexander dijo levantado la voz para que todos los esclavos oyeran. -Levántense y reúnanse con los demás esclavos si no quieren recibir un castigo peor, y a todos les digo que la más mínima desobediencia por parte de ustedes no va a pasar desapercibida y van a ser severamente castigados, aquí están para hacer lo que se les ordene y en la forma que nosotros queramos, la época en que se hacían las cosas como ustedes querían ya pasó, así que si no nos obedecen y además no lo hacen en la forma que nosotros queramos aténganse a las consecuencias. Alexander había ordenado a varios amos de bajo rango que empezaran a sacar fotografías y películas de todas las partes del cuerpo de los esclavos mientras se dirigían al río haciendo las vueltas de carro, pero sobre todo de la zona genital y de las nalgas cuando estaban de cabeza que era una posición muy vulnerable porque también enseñaban el ano, y que eso se debería de hacer cada día en cada actividad que tuvieran que llevar a cabo los esclavos, porque ese material tendría que ser enviado a su oficina para después analizarlo e incluso distribuirlas en tiendas gays, el cual significaba un ingreso muy importante para la isla por concepto de entretenimiento para adultos, pero el objetivo principal era enseñárselos a los cautivos para humillarlos y doblegarlos más fácilmente, al hacerlos parecer ante los demás como unos seres pervertidos y exhibicionistas. Todos los esclavos realmente se encontraban hambrientos ya que llevaban veinticuatro horas sin probar alimento y el ejercicio que les habían obligado a hacer había hecho que el hambre que sentían empeorara a tal grado que muchos incluso se sentían muy débiles, sin embargo todos estaban muy agradecidos por el hecho de que se les había permitido refrescarse además de que el agua del pequeño río que corría estaba limpia a pesar de que se veía turbia. Los guardias en ningún momento permitieron que los esclavos una vez que habían salido del río y se habían formado en la posición de firmes se movieran, y el que lo hacía era castigado con dos azotes de un látigo con varias puntas lizas, éste no dañaba la piel, pero hacia que el golpe ardiera de una manera intolerable debido a la piel húmeda ya fuera por el sudor o por el agua del río. Cada esclavo una vez que entraba al agua tenía que salir lo más rápidamente posible debido a que si no lo hacía corría el riesgo que el otro esclavo que venía atrás de él le cayera encima y lo golpeara, cosa que sucedió varias veces, aunque se dejaron a los esclavos más cansados para el final. Mientras los esclavos estaban esperando en la posición de firmes llegaron cuatro esclavos cargando dos ollas con comida, cada olla era cargada por dos de ellos, los cuales al igual que los que estaban en entrenamiento se encontraban completamente desnudos y eran muy jóvenes. Los cuatro esclavos se pusieron en frente de la hilera de esclavos, y al igual que a sus compañeros no se les permitió moverse y tampoco bajar las ollas, y por varios minutos tuvieron que estar así hasta que recibieron la orden del guardia encargado de la vigilancia, de que cada olla fuera llevada a uno de los extremos de la fila en donde un amo se puso enfrente de cada olla. A la señal de otro amo que estaba observando la hilera de esclavos desde enfrente de la fila, cada uno de los amos tomó una porción generosa de comida de cada una de las ollas y la arrojó al piso en frente de cada esclavo. Este proceso se repitió hasta que las ollas se juntaron y la última porción de comida estuvo enfrente del último esclavo, entonces un amo de bajo rango dijo. -Como ya se pudieron dar cuenta puercos es la hora de alimentarse, sin embargo todo se tendrá que hacer de acuerdo a como se les ordene, hasta el día de ayer ustedes hacían lo que querían, a partir de hoy todo se va a hacer de acuerdo a como se los ordenemos, y si algunos de ustedes se atreve a desobedecer o incluso a dudar en seguir una de nuestras ordenes serán severamente castigados, y algunos de ustedes ya han experimentado lo que un látigo o la descarga eléctrica pueden hacer.- Todos los esclavos se sintieron incómodos con lo que estaban escuchando, pero sabían que no podían hacer nada, y a lo que más le temían en esos momentos era a que los privaran del alimento que tanto les estaba pidiendo su cuerpo. Al ver el amo que los esclavos lo miraban fijamente y sin ninguna reacción desfavorable a lo que había dicho prosiguió- Cada orden que se les de la van a tener que seguir al pie de la letra y cada movimiento que se les ordene que hagan lo deberán de hacer parejos y no pasaremos de ahí hasta que todos lo hagan al mismo tiempo, pero por cada error se seleccionará a uno de ustedes para ser castigado, no necesariamente se castigará al infractor o a los infractores, así que ya saben si no quieren que otro compañero pague por ustedes háganlo todo al mismo tiempo y tal como se les ordenó. Varios de los esclavos se sintieron muy molestos por lo que habían escuchado, pero como era de esperarse no podían hacer nada, además que por el tiempo que llevaban en esclavitud habían aprendido a controlar su temperamento, el amo al ver que los esclavos seguían sin moverse continuó. -El primer movimiento va a ser asumir la posición de descanso, todos ya la conocen, el segundo movimiento va a ser que se hinquen poniendo sobre el piso primeramente la rodilla izquierda y dejaran flexionada su pierna derecha haciendo un hincapié, el tercer movimiento va a ser hincar su rodilla derecha. El cuarto movimiento va a ser apoyar ambas manos sobre el piso asumiendo la posición de gatas, el cuarto movimiento va a hacer agachar la cabeza hasta que su nariz toque la comida, el quinto movimiento va a ser sacar la lengua y lamer la comida, sin embargo no deberán llevarse nada a la boca, simplemente la lamerán, y el sexto y último movimiento es que todos se deberán de poner de pie y asumir la posición de firmes ¿entendieron?, así que háganlo bien si no quieren ser corregido y los castigos serán aplicados desde el primer intento. Todos los esclavos se sintieron muy incómodos ante las ordenes que se les habían dado incluyendo a James Warrioth, pero sabían que eran esclavos y tenían que obedecer sin rechistar a los hombres que tenían el control de sus vidas, así que aspirando profundamente esperaron a que se dieran las órdenes. Uno de los esclavos que se encontraban en la isla por voluntad propia fue el encargado de darlas cosa que molestó a los esclavos que estaban bajo entrenamiento, pero eso era precisamente lo que quería Alexander sacar de quicio a los esclavos para tener la oportunidad de castigarlos. -En descanso- fue la primera orden que escucharon los esclavos pero el movimiento fue disparejo y contrario a lo que se esperaban nadie fue castigo. -Hincapié con la rodilla izquierda- se volvió a escuchar y de nueva cuenta la ejecución fue dispareja y no hubo castigos. -Hincarse- se escuchó la otra orden con voz potente y de nueva cuenta todos los esclavos la ejecutaron y el resultado fue el mismo ya que todos lo hicieron de forma dispareja. -A gatas- fue la siguiente orden y fue ejecutada por todos. -Bajar la cabeza- una vez más la orden se escuchó clara y fuerte y fue obedecida. -Probar la comida- Todos los esclavos sacaron la lengua y rápidamente lamieron su insípido alimento aunque para esas alturas a todos se les estaba haciendo agua la boca con la masa insípida que diario les daban como alimento. -Firmes- se escuchó la última orden y todos los esclavos se levantaron y asumieron la posición, pero con una pequeña diferencia y era que ahora se morían por probar el alimento que estaba sobre el suelo, su boca se les hacía agua y sus estómagos les exigían que comieran. En cuanto todos los esclavos asumieron la posición de firmes y estaban silenciosos, se empezaron a oír gritos de dolor y varios esclavos rompieron la fila moviéndose hacia delante para evitar el castigo que los guardias les estaban aplicando por no haber hecho los movimientos que se les habían ordenado en forma simultanea, así que todo ese proceso se repitió por mas de dos horas antes de que los esclavos pudieran hacer los movimientos en forma pareja y fue cuando la orden se cambió de probar la comida por tragarla. La ejecución de las órdenes había dejado agotados a los esclavos por el esfuerzo físico que implicada cada una de ellas y que habían tenido que hacer por un periodo de dos horas. Sin embargo los amos no les habían dado agua y ahora los esclavos tenían otro problema y ese era la sed, y comprendieron que los seres superiores se iban a aprovechar de sus necesidades físicas para hacerlos hacer lo que ellos quisieran y lo tendrían que hacer bien si querían que sus necesidades básicas fueran satisfechas. El siguiente paso del entrenamiento fue enseñar a los esclavos a mantenerse quietos mientras estos fueran castigados en la posición que se les había ordenado que asumieran, sin embargo no se tuvo mucho éxito en este aspecto ya que la mayoría de los esclavos al sentir el dolor al momento que el látigo golpeaba su carne instintivamente se movían, así que al final de este segundo aspecto de su entrenamiento todos los esclavos tenían marcas de látigos en su cuerpo sobre todo en las nalgas, en la espalda, en el torso y en la parte superior trasera de las piernas. Para cuando esta parte de su entrenamiento terminó, todos los esclavos estaban completamente empapados en sudor y muy sedientos, así que Alexander decidió darles un respiro y dio la orden que los dejaran refrescarse en el río, pero tenían que entrar en la misma forma como lo habían hecho la primera vez dando vueltas de carro, por supuesto que todo este entrenamiento había sido filmado y después de enseñárselo a Breaker y recibir su autorización sería distribuido a los centros de entretenimiento para adultos. También se les prohibió a los esclavos que tomaran agua del río ya que si llegaban a descubrir que lo habían hecho serían severamente castigados, así que no les quedó más alternativa que volver al agua igual que como lo habían hecho horas antes y salir lo antes posible para evitar que el que venía atrás los golpeara, y una vez que estuvieran afuera volver a asumir la posición de firmes en una sola hilera y esperar nuevas ordenes. Cuando todos los esclavos ya habían salido del agua y estaban formados, esperaron a ver cual era la nueva orden de sus amos, y de nueva cuenta se les obligó a repetir las mismas instrucciones que habían entrenado durante la mañana, pero ahora en lugar de tener que lamer la comida al no estar ésta en el piso tenían que besar el pasto, esto se repitió durante toda la tarde hasta que anocheció y los amos les permitieron volverse a refrescar de la misma manera como lo habían hecho en las veces anteriores, pero con la diferencia que a la hora que estuvieron nuevamente formados llegaron los mismos cuatro esclavos que habían llevado la comida con dos recipientes grandes de agua. Los esclavos tuvieron que repetir las instrucciones que se les habían dado pero con la diferencia de que su boca se tenía que quedar en el pasto, y que cuando el amo que acompañaba a los dos esclavos que estaban cargando los contenedores del agua le ordenaba a un esclavo en específico que levantara la cabeza y lo mirara, éste lo tenía que hacer para chupar de una manguera el agua que tanto necesitaba su cuerpo, y cuando terminaba tenía que mantener la cabeza en la misma posición hasta que el amo le indicara que la bajara y con su boca tocara el piso. Cuando todos los esclavos terminaron de beber se les ordenó que asumieran la posición de firmes, para posteriormente llevarlos a los calabozos en donde los encerraron igual que la noche anterior teniendo que dormir amontonados. A la mañana siguiente lo primero que hicieron fue seguir con su acondicionamiento físico ya que para Alexander era muy importante que un esclavo estuviera en condiciones de llevar a cabo cualquier tarea y por lo tanto su cuerpo tenía que estar preparado para eso, una vez que los ejercicios matutinos terminaron les dieron el primer alimento del día y tuvieron que ingerirlo conforme al entrenamiento que se les había dado el día anterior. Sin embargo como era de esperar de nueva cuenta lo hicieron disparejos y los castigos corporales no se hicieron esperar tomando a algunos de los esclavos al azar para ser azotados. Cuando los esclavos ejecutaron pasablemente parejos las órdenes para comer, continuaron con un nuevo aspecto de su entrenamiento. -Ahora animales inmundos van a aprender a saludar apropiadamente a un amo y a un ser superior así como saber comportarse delante de ellos, ya se que para ustedes el tirarse al piso y besarle los pies o hacer un hincapié y besarle la mano es suficiente y hasta incluso el mantener la cabeza agachada, pero no es así. Ustedes siempre deben de mostrar lo que son no importando que es lo que estén haciendo, ustedes deben de darle entender a los seres superiores que son mucho menos que los animales y en todo momento su conducta debe de reflejar eso. Así que les vamos a enseñar a como saludar a un amo y a un ser superior, y una vez que sepan que es lo que tienen que hacer, esa va a ser la forma en que siempre los van a saludar bajo pena de una severo castigo si no lo hacen así.- Dijo Alexander el cual le cedió la palabra a un esclavo voluntario. -Lo primero que un esclavo debe de aprender es la diferencia entre un amo y un ser superior, aunque aparentemente esto es muy fácil de hacer es increíble la cantidad de esclavos que no saben hacer esta distinción. Un amo es aquella persona a la cual pertenecemos, es el que nos compró o nos dominó y nos ha obligado a servirle y tiene plenos derechos sobre nosotros, incluso para aquellos que sean esclavos voluntarios. Nunca hay que olvidar que el amo es aquella persona a la que estamos sometidos o sujetos voluntariamente o la fuerza y le hemos entregado nuestra vida para que haga con ella lo que quiera., incluso podemos tener varios amos como es el caso de este lugar. El ser superior es toda aquella persona que obviamente no es un esclavo y que tampoco es nuestro amo, así que lo podemos definir simple y sencillamente como un ser libre el cual tiene la facultad de hacer con su vida lo que quiera sin tener que rendirle cuentas a nadie, y la diferencia con un amo es que no somos de su propiedad, sin embargo debemos de ser respetuosos con ellos en todo momento, pero no tenemos la obligación de obedecerles a no ser que nuestro amo así nos lo indique. Eso no significa que no tengamos que hacerles caso cuando se dirijan a nosotros y en todo momento deberemos de reconocer su superioridad utilizado la palabra señor al dirigirnos a ellos y con eso hacer notar nuestra vida de servidumbre, también tenemos la obligación de contestarles educadamente cuando se dirijan a nosotros, pero nunca obedeceremos una orden directa de él a no ser que nuestro amo así nos lo indique, o las normas del lugar en donde habitemos así lo establezcan. Por supuesto que un ser superior tiene todo el derecho de ordenar que seamos castigados pero no lo podrá hacer directamente como lo haría nuestro amo, sino que tendría que comentarle al amo lo que se hizo mal y él decidirá que castigo aplicará o en su defecto a la autoridad del lugar conforme marquen los reglamentos. ¿Quedó claro?, y una cosa más, nosotros como esclavos no tenemos ningún derecho, solo obligaciones, y nuestro amo es el único que podrá salir en nuestra defensa si él lo quiere, nosotros como esclavos estamos aquí para obedecer y lo que queramos o pensemos no importa, ya que nuestra única misión es complacer a nuestro amo, y nuestra satisfacción y felicidad es complacerlo, y el nos podrá ordenar que hagamos cualquier cosa y la tendremos que hacer sin dudar si no queremos ser castigados, o incluso ejecutados ya que él no tiene ningún límite en sus derechos sobre nosotros, además los seres superiores siempre tendrán la razón sobre los esclavos, debemos de entender que nuestro cerebro únicamente funcionará para hacer lo que nuestro amo o un ser superior quiera sin importar que nos guste o no. A pesar de que todos los esclavos que estaban siendo entrenados en ese primer grupo ya llevaban algún tiempo en esclavitud y estaban acostumbrados al mal trato que les daban los amos y a las condiciones tan duras en las que habían estado viviendo, todos se dieron cuenta que este era un cambio radical en la forma en que iban a vivir, y que aún las condiciones iban a ser mucho más duras que antes, además de que los amos querían quitarles cualquier libertad que pudieran tener y prácticamente volverlos unos autómatas. Para algunos la situación no era tan mala, sobre todo para aquellos que estaban considerados como piojos u obreros, pero la situación fue muy distinta para los Buitres y sus asistentes ya que ellos si llevaban una vida con ciertos privilegios y por supuesto que este cambio no les iba a convenir. Billy49mx@yahoo.com.mx