Date: Tue, 25 Nov 2008 22:57:25 -0800 (PST) From: Billy Billy Subject: TODO O NADA PARTE 22 TODO O NADA Advertencia: Para poder leer esta historia deberás de tener la edad legal mínima requerida en el país o estado en donde vivas (como la edad legal mínima requerida no es la misma en todos los países e incluso en los estados de algunos países llega a variar, se considerará como edad legal mínima requerida la que marque la ley del lugar o jurisdicción en donde vivas). Este es un trabajo de ficción, tanto nombres, caracteres, lugares e incidencias son producto de la imaginación del autor y han sido usadas de forma ficticia, cualquier semejanza actual con personas vivas o muertas o con algún evento que haya pasado es mera coincidencia Billy49mx@yahoo.com.mx "TODO O NADA? PARTE 22 Por Billy Warrioth tardó unos minutos en recuperarse ya que el golpe que le había dado realmente había sido muy fuerte y el dolor que sintió fue indescriptible. Cuando se sintió con la suficiente fuerza para sostenerse se puso de pie y caminado con cuidado se dirigió primeramente al sótano que era en donde estaba la cava para seleccionar el vino que tenía que llevar, y posteriormente fue al refrigerador para ver que había ahí y prepararle algo de comer al agente secreto. El simple hecho de volver a cocinar trajo de nueva cuenta a la memoria de James su vida anterior y lo diferente que ésta había sido no mucho tiempo atrás, y recordó que en algunas ocasiones incluso cocinaba dos clases de platillos diferentes simplemente por el placer de cocinar y de degustar una buena comida, ahora lo volvía a hacer pero para alguien que lo tenía dominado y que incluso le había prohibido que comiera, así que simplemente se encogió de hombros resignado a su triste condición, suspiró y le preparó la cena a su amo. Cuando todo estuvo listo buscó una charola y todo lo que había cocinado incluso el vino y la copa fueron puestos en ella y se dirigió a la sala en donde su amo estaba leyendo, sin embargo lo tuvo que hacer con mucho cuidado ya que aún sus testículos le estaban doliendo y se sentía todavía débil. -Amo aquí está su cena ¿en donde quiere que la ponga? -Dame la charola.- James obedientemente se la dio- Ahora ponte a gatas y que tu costado izquierdo esté tocando mis espinillas y mis rodillas.- Warrioth desconcertadamente hizo lo que se le ordenaba- Bien ya tengo mi mesa. Mientras que Warrioth se había convertido en una mesa el amo empezó a probar los platillos que él le había preparado, y James supo que le habían gustado por las expresiones de placer que emitía de vez en cuando. Para deleite del amo y para la desfortuna de él la comida se prolongó bastante tiempo, ya que el amo aparte de comer deliberadamente lento, al final decidió tomarse poco a poco toda la botella de vino, y se encargó de saborearla lentamente. Warrioth no sabía si el amo le había dejado algo de comer, pero para esos momentos realmente se estaba muriendo de hambre ya que llevaba muchas horas sin probar alimento y no se atrevía a voltear por temor a ser castigado, así que no le quedó más alternativa que esperar pacientemente hasta que el amo le indicara que había terminado. Nuevamente los pensamientos de su vida anterior empezaron a llegar a la mente de James y lo realmente buena que había sido su otra vida a pesar de los problemas financieros que había tenido, y se lamentó de no haber luchado por salir adelante por si mismo y de haber tomado el camino más fácil, que a final de cuentas se había convertido en el mas difícil ya que había terminado en su esclavitud. Intentó sacudirse esas ideas de la cabeza porque sabía que no le iban a ayudar en nada y pensó que era mejor concentrarse en su vida actual, ya que consideró que eso lo ayudaría a hacerla un poco más llevadera, y su mente lo llevó a la esclavera en donde ahora era el buitre y en los chicos que dependían de él y de los problemas que estaban pasando en esos momentos, y deseó poder estar con ellos para llevar la pesada carga que les había dejado por los asistentes que no querían cooperar. Se le vino a la mente el muchacho que había sido golpeado por uno de ellos, quiso acordarse de su nombre pero no lo conseguía, sabía que era sumamente importante llamarlos por su nombre ya que para un esclavo el que un esclavo con mayor rango como era el caso de un buitre lo llamara por su nombre de pila significaba mucho, así que forzó a su mente para que se acordara y al final recordó que se llamaba Bradley. También se sintió mal porque desde que había alcanzado el máximo escalafón de los esclavos, no había tenido el tiempo suficiente para involucrarse en las actividades de la esclavera y por lo tanto no sabía bien a bien como trabajaba todo, y confió en que Andrew que llevaba más tiempo esclavizado que los demás, pudiera medio dirigir a los otros chicos para satisfacer las demandas de los amos y de la mejor manera dentro de lo posible las necesidades de los esclavos, pero al pensar en todo eso sintió como su angustia iba creciendo por la impotencia que sentía de no poder ayudar a sus fieles colaboradores y sintió como la desesperación se iba apoderando de él, así que decidió pensar en algo más agradable ya que de nada la serviría deprimirse, así que su mente lo llevo a revivir los momentos que había pasado ese mismo día con el esclavo encargado de limpiar la enfermería, y nuevamente se sorprendió del descubrimiento que había hecho en el sentido de que un hombre pudiera darle placer a otro hombre de una forma tan intensa, y que a pesar de todo no había sido tan malo como él creía. Sus pensamientos fueron bruscamente interrumpidos al sentir como el amo empezaba a manipular su verga, y nuevamente se sintió humillado, y luchó con todas sus fuerzas para no responder a la manipulación y evitar que su miembro viril se erectara a toda costa, sin embargo no lo consiguió y pronto su verga estuvo parada y las sensaciones de placer al ser manipulada invadían todo su cuerpo. Cuando el Agente secreto sintió que el cuerpo de Warrioth se tensaba al aproximarse el orgasmo, tomó un plato que estaba en la charola y lo puso debajo de su verga, y al estallar todo el semen cayó sobre éste, entonces el amo esparció el líquido blancuzco y viscoso sobre las sobras con sus dedos, y después lo puso en el suelo enfrente de la cara de James y le ordenó que comiera como un perro. Al ver James su propio semen esparcido sobre la comida que su amo le había autorizado a comer sintió asco y estuvo a punto de no hacerlo, pero a final de cuentas su hambre y el recuerdo de la orina que había sido obligado a beber le hicieron entender que su semen y los espermatozoides que éste contenían después de todo no eran tan malos, así que sin pensarlo dos veces se comió las sobras y pudo saciar de esa manera su hambre, y cuando terminó de comer se quiso limpiar la cara pero su amo se lo impidió, le dijo que lo podría hacer hasta que lavara los platos y limpiara con su lengua la zona en donde había comido. Una vez que todo estuvo hecho el agente secreto le dijo a Warrioth, que tenían un trabajito que hacer, así que ambos descendieron al sótano caminaron al final de la cava y le ordenó a James que se tirara al suelo boca abajo y que mantuviera su vista en el piso, una vez que verificó que el esclavo había hecho lo que le había ordenado, movió una botella y digitó una clave en un panel electrónico escondido y eso hizo que una puerta oculta se abriera y dejara al descubierto un pasillo tenuemente iluminado. -A partir de este momento te vas a arrastrar por el piso cerebro de mierda, y cuidado con que te intentes poner de pie o levantar la cabeza porque te garantizo que voy a hacer que te arrepientas, mis talones te van a guiar por lo tanto debes de mantenerte todo el tiempo cerca de mi, y no creas que voy a ir más lento por ti ¿entendiste? -Si mi amo. -Está bien no podemos seguir perdiendo el tiempo. El agente secreto caminó por el pasillo mientras que James Warrioth lo seguía arrastrándose, sin embargo esta fue realmente una tarea muy ardua para él ya que el arrastrar su cuerpo e impulsarse tanto con sus muslos y pies así como con sus brazos y manos era algo a lo cual no estaba acostumbrado e iba muy lento. El agente secreto varias veces se adelantó y tuvo que esperarlo ya que se estaba quedando muy atrás y pensó en castigarlo, pero consideró que era mejor esperar a ver como se desenvolvía en la tarea que tenía por delante y de esa manera determinar si debía de ser castigado o no. Llegaron a una puerta blindada la cual estaba cerrada y tuvo que esperar a que James estuviera detrás de él para teclear la clave y poder entrar, ya que la puerta solo iba a estar abierta mientras que el censor registrara la presencia de alguien, sin embargo como James se iba arrastrando era imperante que entrara inmediatamente detrás de él porque la puerta duraría unos cuantos segundos abierta para posteriormente cerrarse y dejarlos encerrados, ya que por la altura del censor no iba a registrar la presencia de el esclavo que se estaba arrastrando y una vez adentro el agente secreto le dijo. -Quiero que te vayas arrastrando a la esquina que está a tu izquierda y en cuanto llegues te hinques viendo a la pared, y con tus manos extendidas sobre tu cabeza y las palmas tocando la pared, y no te atrevas a mirar hacia atrás a no ser que yo te lo te lo ordene ¿entendiste? -Si amo. Warrioth hizo lo que se le ordenó y mientras que se dirigía a la esquina, se percató que el aire de lugar estaba muy cargado y olía a sudor humano, y supo que ahí tenían a alguien, sin embargo no se atrevió a desobedecer la orden que se le había dado. Warrioth no pudo darse cuenta de que era lo que estaba haciendo el agente secreto ya que como estaba desnudo sus pasos no se podían oír, pero de repente escuchó un gemido ahogado y de nueva cuenta el silencio. James aguzó el oído para ver si podía escuchar más, sin embargo había un silencio completo y absoluto en ese lugar, ni tan siquiera podía escuchar tanto la respiración del hombre que tenían cautivo ahí como la del amo, y eso realmente lo empezó a inquietar y el pánico lo empezó a invadir. Un miedo irracional se empezó a apoderar de él y estuvo a punto de gritar, pero con un esfuerzo sobre humano se pudo contener, sin embargo tanto los malos tratos como la tensión nerviosa a la cual lo habían tenido sujeto hasta ese momento se empezaban a cobrar factura, volvió a sentir que se desmoronaba mentalmente y por lo menos pensó que si se volvía loco la muerte sería el remedio para toda aquella locura en la cual había sido obligado a vivir. Pero inmediatamente se acordó de los jóvenes esclavos que dependían de él, y del futuro tan negro que les esperaba si él no hacia nada para ayudarlos, y se rió en silencio al darse cuenta del término que había utilizado, ya que de todas formas el futuro que tenían por delante era precisamente de ese color, aunque en realidad podía ser peor. Pero en esos momentos se le vinieron a la mente las caras de Robert, Andrew, el chico al cual había defendido cuando vio que había sido golpeado y que de nueva cuenta se le había olvidado su nombre y de Stephan, que al verlo era la imagen viva de la inocencia y se convenció de que tenía que seguir adelante por ellos. No sabía en donde iba a terminar todo eso, pero de algo estaba seguro y eso era que iba a sobrevivir y a luchar contra viento y marea para protegerlos a ellos, a sus amigos y a todos los que pudiera con la esperanza de un día poder salir de ese infierno, aunque la verdad no sabía como hacerlo ya que en el tiempo que llevaba ahí había comprobado que todo lo que le habían dicho era cierto, no había manera de escapar y estaban completamente indefensos ante la voluntad de aquellos hombres que se hacían llamar seres superiores y que pensándolo bien realmente lo eran, porque habían sabido como controlarlos y dominarlos y sobre todo hacer que les sirvieran sin tener que dar nada a cambio. También se acordó del esclavo de Breaker el cual había sido policía y comprendió el porque no hacía nada por intentar recuperar su libertad a pesar de que estaba entrenado para ello. En la parte central del aquel cuarto que estaba cerrado en forma hermética dentro del calabozo en el subsuelo de la casa, había una plancha de cemento y sobre ella una colchoneta no muy gruesa cubierta con una sábana blanca. Sobre la colchoneta estaba un hombre desnudo de piel blanca, pelo negro y de unos 30 años, cuya espalda inferior estaba apoyada sobre ésta, en cada uno de sus brazos y piernas tenía muñequeras y tobilleras de piel. Del techo descendían paralelamente unas cadenas a la altura de su ombligo y estaban separadas la una de la otra por la distancia que había entre sus hombros, y habían sujetado a cada cadena la muñequera y la tobillera del mismo lado, y la cadena en la parte inferior se encontraba sujeta a la plancha para evitar que se moviera y quedara de esa manera todo el tiempo rígida. Como descendían las cadenas a la altura de los hombros, sus piernas estaban separadas dejando a la vista el ano y sus testículos. Al estar sujetas a las cadenas las tobilleras de cuero dejaron las piernas ligeramente flexionadas hacia los pectorales, ya que a la altura a la cual habían sido aseguradas no permitían que las piernas pudieran ser extendidas completamente, y al estar las cadenas a la altura del ombligo hacían que las piernas se tuvieran que echar hacia atrás. Las muñequeras estaban sujetas a la altura de las rodillas por lo tanto los brazos tampoco quedaban completamente extendidos hacia arriba y por el contrario quedaban doblados hacia delante y un poco hacia arriba, por lo que hacía prácticamente imposible que el esclavo pudiera apoyar su cabeza y sus hombros en la colchoneta teniendo que estar en una posición sumamente incómoda, además para empeorar la situación del esclavo una especie de candado le estaba torturando los testículos ya que los tenía completamente apretados y atrapados entre el artefacto y su escroto dejándolos completamente expuestos, y todavía le habían metido un dildo en su ano y le habían tapado la boca con cinta adhesiva, aparte de torturarle las tetillas con pinzas de metal. El agente secreto inspeccionó la forma, la posición y la manera en que estaban torturando al esclavo y se sintió satisfecho. -Por lo que veo ya estás cómodamente instalado.- Le dijo el agente secreto al prisionero el cual únicamente pudo mover su cabeza y sacar unos gruñidos sofocados por la cinta que le estaba tapando la boca.- Lamento no haber sido yo el que te haya puesto cómodo pero como comprenderás el viaje fue muy largo y necesitaba dormir un poco y refrescarme, supongo que a ti te han de haber refrescado antes de ponerte aquí y ya habrás tenido tiempo descansar lo suficiente, ya que es bueno que un prisionero que en realidad ya es un esclavo siempre esté descansado antes de iniciar una sesión con su amo. El prisionero intentó moverse y hacer ruido para con eso darle a entender en la situación tan incómoda y desesperada en la que se encontraba. -Cara de nalga, levántate y ven aquí a mi lado- Le ordenó el agente a James el cual inmediatamente obedeció.- Quiero que con la punta de tu lengua lamas los bordes del ano que están sujetando al dildo y no pares hasta que yo te lo ordene. Warrioth obedeció inmediatamente, se subió a la plancha de cemento se puso en la posición de gatas y bajó la cabeza y brazos hasta quedar a la altura del ano y empezó a lamer sus bordes. El agente secreto se quedó mirando sin perder detalle de lo que estaba haciendo James para que en caso que dejara de hacer diligentemente lo que le había ordenado lo castigara inmediatamente, aunque de vez en cuanto volteaba a ver la cara del esclavo que estaba inmovilizado y el verla reflejar el terror y el cansancio que sentía le hizo sentirse satisfecho. Sabía que para ese entonces el dolor y la incomodidad que debía de estar sintiendo en el ano debían tenerle los nervios a punto de explotar, ya que por el simple hecho de estar en una posición tan incómoda y forzadamente tener abierto su esfínter por varias horas tenía que terminar en que su cuerpo protestara, además de que habían bloqueado la salida de la uretra con un pequeño objeto que le habían introducido por el pene lo cual le había impedido el poder orinar así que sabía que el esclavo estaba al límite. -Te voy a quitar la mordaza de la boca, pero más te vale que no grites o intentes hablar a no ser que te lo autorice ya que de lo contrario voy a hacer que te arrepientas. Mientras que Warrioth seguía haciendo lo que se le había ordenado, el agente secreto le quitó al esclavo la mordaza. -Ahora quiero que me digas en donde se encuentra lo que estoy buscando. -No se de lo que me está hablando, nunca he escuchado nada al respecto. -¿Estás seguro de eso? -¿Qué me ganaría con mentirle?, vea en las condiciones que me tiene, ¿a caso cree que me gusta sufrir? -Cara de nalga ahora quiero que le mames la verga y que le pongas especial atención al glande. Como era de esperarse James inmediatamente obedeció, para él cualquier resistencia que pudiera tener al saber que iba a tener sexo con otro hombre había desaparecido, y comprendió que el hecho de haber estado en la enfermería con el auxiliar de limpieza había sido un paso más en su entrenamiento como esclavo, y que todo lo que habían hecho había sido ordenado por un amo, y aunque había sido muy placentero a final de cuentas la verdadera intención había sido llevarlo a un nivel mucho más profundo dentro de su esclavitud. El placer de ser mamado en esa zona tan sensitiva de su cuerpo hizo que el esclavo gimiera, pero sin embargo su incomodidad iba en aumento ya que otra sensación empezó a torturar a su ya sobrecargado cerebro y esa era las ganas de orinar. -Cara de nalga deja de mamar al esclavo y párate en la cabecera de la plancha y sujétale con fuerza la cabeza para que no la vaya a poder mover. -¿Qué me va a hacer?- dijo con pánico el esclavo inmovilizado. -Ya lo verás es una sorpresita. -Ya le dije que no se absolutamente nada de lo que está buscando, nunca he oído mencionar eso. -¿Por qué tendría que creerte? -¿Usted cree que me gusta estar en esta situación tan incómoda? -Pudiste haber sido entrenado para aguantar mucho y de esa manera hacer pensar a los demás que no sabes nada ¿no lo crees? -De veras que usted está loco, no comprendo como hay gente que pueda pensar como usted. -Te sorprendería saber que hay mucha gente que piensa como yo. El agente secreto se alejó de la plancha de cemento y de una pared tomó una fusta, al ver el esclavo lo que tenía en sus manos el amo preguntó con pánico. -¿Para que quiere eso? -Ya lo verás este es un buen amigo mío, y espero que también se convierta en el tuyo pero claro está de una manera diferente. Al agente secreto se acercó a la plancha de cemento y con movimientos rapidísimos azotó las nalgas del esclavo varias veces haciendo que gritara del dolor, para después golpear sus testículos expuesto. Esto hizo que el torturado perdiera el conocimiento, entonces el amo le ordenó a Warrioth que llenara una cubeta con agua, la llave y la cubeta se encontraban a un lado del panel en donde tenían los instrumentos de tortura, James hizo lo que se le ordenó y cuando regresó con ella por orden del agente secreto la vació sobre la cara del esclavo el cual inmediatamente reaccionó. -¿Me vas a decir en donde está lo que estoy buscando? Ahora el pánico se había apoderado del torturado prisionero. -No me torture más se lo juró no se a lo que se está refiriendo jamás he escuchado nada al respecto. El agente volvió a repetir el castigo teniendo los mismos efectos y ordenándole a Warrioth que lo volviera a reanimar para continuar con el interrogatorio. Sin embargo las horas transcurrieron y el prisionero no habló a pesar de las diferentes torturas a las cuales fue sujeto, así que el agente secreto se convenció de que no sabía nada, y dirigiéndose a un teléfono que estaba pegado a la puerta blindada de la entrada, ordenó que uno de los amos que había sido recientemente esclavizado se encargara de disfrutar del esclavo antes de que lo llevaran a una de las esclaveras, entonces le ordenó a James que se tirara al piso boca abajo y que arrastrándose lo siguiera. Se internaron aún más por el pasillo en el sótano, Warrioht no podía creer que se complicaran tanto la vida construyendo la casa de una forma tan compleja, pero a final de cuentas se rió para sus adentros ya que en ese lugar nada tenía lógica para él y al igual que para la mayoría de los demás esclavos ya que todo eso era una locura, pero tenía que aceptar que para aquellos que estaban sobre los esclavos era un lugar muy agradable para vivir aunque claro con sus peligros, pero nada en esta vida era fácil ni gratis, y si podía resumir en palabras la nueva sociedad en la cual estaba viviendo quedaban en tres "todo o nada". Llegaron al final del pasillo y para esos momentos James estaba sudando copiosamente por el esfuerzo que había tenido que hacer, ya que la distancia había sido mucho más larga y el cansancio se había apoderado haciendo que sus movimientos fueran más lentos, pero al parecer al agente secreto que por cierto aún no sabía su nombre no le había molestado y eso fue un alivio para él. Para abrir otra puerta blindada que estaba al lado derecho, el amo temporal de James volvió a teclear una clave, ésta se abrió deslizándose hacia el lado izquierdo y una vez que estuvieron adentro la puerta inmediatamente se cerró no permitiendo que nadie pudiera entrar o salir. -Bien cara de nalga, ponte en cuclillas con tus manos sobre la nuca y las piernas lo más separadas que puedas- James inmediatamente obedeció- Tengo que alimentar a un esclavo muy especial, y si me complace tu trabajo entonces te daré de comer a ti también, en caso contrario pues ya sabes estarás con el estómago vacío hasta que yo lo quiera, aunque honestamente no entiendo porque los tenemos que alimentar- se le quedó viendo al esclavo por unos instantes y sonrió burlonamente- si ya se, es porque la naturaleza así nos creo, pero honestamente debió de haber hecho alguna diferencia ya que no somos iguales, pero en fin que le vamos a hacer, para eso hemos creado la isla para ayudarla en lo posible a empezar a establecer esta diferencia como comprenderás. A pesar de que Warrioth sabía que debía de controlarse los comentarios del agente secreto lo hicieron enfurecerse, pero con voz calmada le dijo. -¿Puedo hablar amo? -Por supuesto cara de nalga, aunque honestamente dudo que puedas decir algo coherente. James no comprendía porque estaba tan de buen humor su amo temporal, si no había podido conseguir la información que estaba buscando. -Considero que no es necesario ayudar a la naturaleza, ella siempre se ha encargado de poner las cosas en su lugar, a veces le toma algo de tiempo pero siempre lo hace. -Tienes razón cara de nalga, la naturaleza es muy sabía, pero el problema principal es que nosotros no tenemos el tiempo que tiene la naturaleza, ya que para ella el tiempo es relativo, para nosotros no, y lo que Breaker quiere hacer es dejar bien estructuradas las bases de nuestra sociedad, pero sobre todo dejar a un gran líder como él lo es al mando de nuestro gran paraíso para así garantizar nuestra continuidad. -Pues ahí si va a tener una labor muy difícil, porque honestamente hablando, la gran mayoría de los amos por lo menos hasta donde yo he visto lo único que están haciendo es buscar su propio placer. -Vaya cara de nalga creí que eras más inteligente pero desgraciadamente me has demostrado que no lo eres, confirmando que tienes excremento en la cabeza en lugar de cerebro. -¿Usted realmente cree que yo o los demás esclavos no somos seres pensantes? -Tu solamente opinas por lo que ves desde tu condición de pedazo de mierda, no tienes toda la perspectiva para poder hacerlo, ya que vives en donde nosotros queremos que vivas y por lo tanto solo ves lo que nosotros queramos que veas, y saber lo que nosotros queramos que sepas, eso mismo pasa con todos los esclavos, además si analizamos tu vida a no ser que me equivoque, ni tan siquiera fuiste capaz de defender lo más valioso que tenías que era tu libertad, así que por lo tanto no creo que estés capacitado para poder opinar, ¿alguna vez te has puesto a pensar en donde se deposita la mierda?, si ya lo adivinaste ¿crees que estando en el suelo o en otro lugar donde es puesta como una letrina o en un escusado se tiene alguna perspectiva para poder opinar o hacer algo?, la respuesta es no ¿verdad?, eso es exactamente lo que nosotros hacemos con ustedes, al ser considerados como tal los ponemos en el lugar que les corresponde para que permanezcan ahí sin saber que es realmente lo que está pasando, y solo vivan para complacernos y obedecernos y de esa forma satisfacer sus necesidades primarias e inmediatas y no más, entonces en base a eso es mejor que alguien te indique que es lo que tengas que hacer no importando que te tengan que obligar a hacerlo, ya que es de la única manera de que no te vas a lastimar a ti mismo o aún pero a lastimar a alguien más, pero ya basta de hablar de cosas que no comprendes, ahora lo que quiero que hagas es que vayas al armario que está enfrente de ti en la posición que te encuentras y que me traigas todo lo que está en este papel - y le entregó una hoja con varias cosas escritas -, y por nada del mundo te vas a poder levantar para alcanzar o traerme las cosas en caso contrario vas a ser castigado. -Le pido autorización para no tener mis manos en la nuca. -Solamente las podrás mover en caso de que necesites alcanzar algo o que no pueda ser transportado cuando tus manos estén en esa posición, de otra forma siempre deberán estar apoyadas ahí. Lo primero que la hoja decía era cubeta con agua así que Warrioth la localizó y después buscó en donde se encontraba la toma de agua para llenarla, y vio que la cubeta estaba al lado opuesto de la habitación de en donde se encontraba la llave, así que primero fue por la cubeta y después a llenarla, y cuando terminó, la tomo con las dos manos, para llevárselas a la nuca y de ahí dirigirse a donde se encontraba el amo, algo de agua se derramo mojándole la espalda, pero para su fortuna no fue mucha, ya que el agua derramada en el piso iba a ser que éste se volviera resbaladizo y le dificultara en sobremanera el poderse mover por la habitación. Después se fijo en el papel el cual le pedía leche en polvo, así que fue al armario lo abrió y ahí se encontró con el primer problema ya que la leche estaba en la última repisa y en la posición en la cual se encontraba le iba a ser imposible alcanzarla, así que tenía que idear la manera de poderlo hacer, al no tener autorización para levantarse buscó una herramienta con la cual poderla alcanzar y vio un palo de escoba que se encontraba en el lado opuesto de donde estaba el armario, así que de nueva cuenta tuvo que cruzar el cuarto para traerlo. Estudió cual era la situación y consideró que era mejor no pegarse completamente al armario, ya que desde la posición en donde se encontraba no podía ver cual era el tamaño de la bolsa de leche, y su mayor prioridad era que no lo golpeara para evitar una lesión, así que levantó el palo y con todas sus fuerzas empezó a empujar para hacer que el bulto se moviera, y fue entonces cuando comprendió del porque el agente secreto le había ordenado que todo lo hiciera en esa posición, y no le quedó más que mover la cabeza en forma negativa y reconocer realmente que todo estaba pensado para humillar y hacerle más difícil la vida a los esclavos, ya que todo estaba planeado para que su autoestima se viniera a bajo y dejaran de luchar para ser sometidos más rápidamente. El bulto de leche era sumamente pesado, y a pesar de que solo iban a necesitar un puñado se le había ordenado que llevara el bulto completo. Después de varios intentos desesperantes y agotadores en los cuales el bulto se iba moviendo unos cuantos centímetros a la vez, por fin lo tuvo en la orilla y la gravedad hizo lo restante, sin embargo al ser tan pesado y grande cayó muy rápido dirigiéndose hacía él, y apenas tuvo tiempo de poder quitarse para evitar que lo golpeara cayendo de nalgas hacia atrás con un sonido ahogado al momento que su carne desnuda tocaba el suelo, causando que el agente secreto se riera burlonamente ya que era imposible de que lo pudiera agarrar antes de que tocara el piso. Después de varios agotadores minutos por fin tuvo todos los artículos que el papel decía, entonces el amo le ordenó que se subiera a una silla y que volviera a ponerse en cuclillas sobre esta y le empezó a acariciar la cabeza como si fuera un perro. -Buen chico, ahora tengo todo lo necesario para alimentar al otro cerdo inmundo, aunque te tengo que confesar una cosa y esa es que realmente no necesito todo lo que trajiste, simplemente te hice trabajar de más como se debe de hacer con un esclavo. James sintió como el coraje y la frustración se apoderaban de él, toda sus fuerzas se concentraron en esos dos sentimientos, y cuando estuvo a punto de enfrentarse al agente secreto sin importarle las consecuencias algo lo volvió a la realidad, la sorpresa fue muy grande y no podía creer lo que estaba sintiendo, pero las sensaciones que mandaba su cuerpo al cerebro no mentían, un dedo estaba penetrándolo por el ano, y todo su coraje y frustración se convirtieron en humillación y desconcierto. El agente secreto se estaba encargando de hacerle notar que él no era nadie sino tan solo un juguete, y que bastaba con ese simple hecho para reafirmar todo lo que habían estado haciendo desde que había llegado a la casa el día anterior. El dedo se adentró aún más en el ano expuesto y empezó a tocar con fuerza las paredes del recto mientras que iba avanzando hacia su interior, eso desconcertó completamente a Warrioth pero no se atrevió a moverse, de repente sintió placer cuando toco algo dentro de él e hizo que su verga se empezara a parar, entonces el dedo no avanzó más, los toques en esa zona tan especial se hicieron más insistentes haciendo que James incluso gimiera, entonces el agente secreto le ordenó que tomara de la mesa un plato de comida para perro y que lo pusiera delante de su verga erecta, James hizo lo que se le había ordenado, y las sensaciones tan intensas y placenteras que estaba sintiendo hicieron que tuviera a los pocos minutos uno de los orgasmos más intensos de los que se acordara y soltó una gran cantidad de semen el cual fue a depositarse al plato. El agente secreto no contento con eso tomó la verga de James y la manipulo hábilmente hasta que estuvo seguro de que no había más semen por expulsar, entonces llevó el plato a la mesa en donde se habían puesto todo y le indicó a James que se pusiera de pie. Le ordenó que le prepara el desayuno al prisionero que aún no había visto y observó que lo hiciera según las especificaciones que le había dado vigilando cada detalle, y mientras lo hacía le comentó. -No se si lo sepas, pero tu negocio es un verdadero éxito, apenas lo tomamos nosotros y en unas cuantas semanas realmente ha levantado mucho, por supuesto que eso tiene muy complacido al amo que fue asignado para hacerse cargo de tus empresas, así como todos aquellos aspirantes a amos que están involucrados en eso, y según se que por lo menos ya conoces a cuatro de ellos, pero solo hay una cosa que me tiene sorprendido y hasta cierto punto molesto, ya que todo el crédito se los están dando a ellos y no debería de ser así, ya que todo lo basaron en un estudio que tu habías elaborado, no me mal interpretes por supuesto que la inyección del capital fue muy importante, pero después encontraron archivados los papeles que contenían el resultado de tu investigación, y eso fue lo que hizo despegar de forma realmente insospechada a tus productos y negocios, incluso ni tan siquiera fue necesario cambiarles los nombres. -¿Por qué me dice todo esto?, usted perfectamente sabe que yo no puedo disfrutar de esos beneficios en las condiciones en que me encuentro actualmente. -Nunca fue nuestra intención que tu participaras de nada, simplemente te lo digo para que estés consciente del cerebro de mierda que tienes, y que a pesar de que tuviste la solución en tus manos la dejaste ir. -Mi único error fue haberme equivocado en seleccionar a los inversionistas. -Te equivocas, tu verdadero error no fue ese, sino tu ambición. -¿Mi ambición?, ¿de que está hablando? -Muy sencillo, no es necesario ser un genio de las finanzas ni de las relaciones humanas, para poder darse cuenta cual era el segundo objetivo que te habías planteado, por supuesto que el más importante era el de rescatar financieramente a tus empresas, pero el segundo y el que más impacto tanto financiero como social iba a tener, era el poder ser parte de la elite de los hombres de negocios o ¿me equivoco? James agachó en esos momentos la cabeza y se sintió avergonzado porque el agente secreto estaba diciendo la verdad. -Es cierto, creí que eso iba a ser posible. -Déjame decirte algo, pronto vas a descubrir que es mucho mejor vivir en la isla que vivir en el mundo del cual vienes. -¿Usted cree esto? -Así es. Bueno veo que ya está listo el alimento, dámelo y no entres al lugar al cual voy a no ser que te lo indique entendiste. -Si amo. El agente secreto se fue al fondo del cuarto le indicó a James que se bajara de la silla y que se volviera a tirar boca a bajo mirando al piso, y al verificar que no estaba viendo hizo a un lado una de las piedras la cual dejó a la vista un teclado, tecleó una clave y una puerta oculta se abrió, inmediatamente puso la piedra que había movido en su lugar y entró. Estuvo por algunos minutos adentro y de repente Warrioth le escuchó decir que entrar en la misma posición en la cual se encontraba cosa que hizo inmediatamente. Al entrar James no daba crédito a lo que sus ojos estaban viendo ya que al no tener una guía varias veces tuvo que levantar la cabeza para ver hacia donde se dirigía. En el piso que era de madera en la posición de gatas estaba un hombre desnudo. Se notaba que lo habían pelado a rapa y que apenas su pelo castaño claro empezaba de nueva cuenta a crecer en su cabez,a era de piel blanca de unos 28 años de edad. Lo único que llevaba puesto era un collar de acero inoxidable que mantenía extendido su cuello, de la parte delantera salía una barra de ese mismo material que se extendía varios centímetros más allá de su cabeza, en sus muñecas se habían asegurado muñequeras de ese mismo material, y en la parte interna de cada una de ellas se unía una vara de metal también inflexible la cual lo obligaba a mantener las manos separadas, y exactamente en el centro se unían al barra que salía del cuello, haciendo que fuera prácticamente imposible doblar o bajar las manos. Sus brazos no estaban completamente extendidos ya que sus codos estaban un poco flexionados, pero con eso habían logrado su objetivo, el cual era asegurarse de que sus manos no pudieran ser utilizadas para casi nada. Su cara estaba tocando la comida ya que únicamente podía tener acceso a ella con la boca, y ya fuera que la introdujera con la lengua o sorbiéndola, entonces el agente secreto le dijo a James -Cara de nalga, he decidido ser bondadoso contigo y quiero que también comas, así que ponte boca arriba y arrástrate hasta donde está el cerdo que está comiendo, lo que van a hacer es muy simple, el esclavo con su boca va a recoger la comida del plato, un bocado va a ser para él y otro va a ser para ti, cuando sea el tuyo, el lo va a masticar y te lo va a pasar a la boca, tu lo vas a tener que volver a masticar y te lo vas a tragar, cuando el bocado sea para él, también va a tener que recoger la comida del plato con su boca te la va a pasar a ti sin masticarla, una vez en tu boca tu la vas a masticar y se la vas a volver a pasar a él para que él la vuelva a masticar y se la trague, ninguno de los dos está autorizado para cambiar de posición así que tu te las vas a tener que ingeniar para acercarte a él y recibir los bocados de su boca, y como los platos no son muy grandes, van a ser dos, para que cada uno de ustedes tenga uno en el estomago, espero que la mierda que tienen como cerebros hayan entendido porque de lo contrario van a ser severamente castigados así que empiecen. Warritoh se acercó al esclavo arrastrándose pero ahora de espaldas, y cuando estuvo cerca estudió la situación y por un momento pensó que la única forma de poder hacer que sus dos bocas estuvieran en contacto tal y como lo había ordenado su amo, era que al momento en que su compañero de esclavitud tuviera el alimento en su boca el empujara hacia algún lado el plato, para pasar por arriba de sus brazos e intentar ponerse debajo de la boca de su compañero para que éste vaciara su contenido en la suya, aunque no estaba muy seguro de que su cabeza cupiera entre el espacio que había entre la cabeza del esclavo y las barras que le sujetaban las manos y el cuello, y después de pensarlo un poco mejor, se le ocurrió otra forma de hacerlo, y esa fue que su compañero levantara su cabeza del piso y por consecuencia al mismo tiempo se iban a levantar sus brazos, el se arrastrara debajo de ellos se colocara debajo de su boca y que el descendiera su cabeza hasta que sus manos tocaran con sus pectorales, el palto de comida debería de quedar sobre uno de los hombros de James, el sujetaría el plato con una de sus manos, para que el otro esclavo al mover la cabeza y con ellos sus manos y barras de metal no fueran a tirar el plato y con ello el contenido de éste, esto facilitaría que él esclavo pudiera meter en su boca al alimento y con ello hiciera el movimiento de regreso y que se sus bocas se tocaran. James le hizo saber al esclavo que era lo que estaba planeado y éste asintió y de esa manera desayunaron, y aunque ambos al principio se sintieron asqueados por lo que tenían que hacer, a final de cuentas se sobrepusieron a eso, pero el cansancio al final hizo que sus movimientos fueran sumamente lentos, pero eso no le importó al agente secreto el cual divertidamente gravó todo el espectáculo que los dos esclavos le habían brindado. Cuando todo hubo terminado el agente secretó le ordenó a James que se pusieran a gatas y que salieran de ahí dejando de nueva cuenta al esclavo encerrado y completamente a oscuras, las dos puertas de esa celda se cerraron y lo mismo pasó cuando salieron del sótano y entraron a la cava para posteriormente ascender a la cocina y de ahí a la sala. -Espero que te haya gustado tu desayuno cara de nalga, y no te puedes quejar ya que tuviste un desayuno fuera de lo común, y creo que vale la pena que sepas que hay muchos hombres de negocios que desearían cambiar sus rutinas cotidianas, y para ser sincero tu lo has hecho sin ser uno de ellos, es increíble lo divertido que puede ser convertirse en un pedazo de mierda ¿no lo crees? Warrioth realmente se encontraba muy cansado y aún asqueado pero no se atrevía a decirle nada al agente secreto ya que pensó que era el más sádico de todos los amos que hasta ese entonces había conocido, después de Breaker. -Si amo y estoy muy agradecido que haya tenido la gentileza de alimentarme.- Aunque en realidad en su interior estaba destrozado por la humillación a la cual había sido sujeto. -Hablando de comer, tengo hambre, ve a la cocina y prepárame algo. -Como usted ordene amo. Warrioth se dirigió a la cocina a hacerle el desayuno a su amo temporal, sin embargo a diferencia de las ocasiones anteriores ahora se sentía derrotado y todo lo estaba haciendo mecánicamente, por primera vez estaba aceptando el hecho de que era alguien que no valía nada y que en realidad estaba en un nivel inferior a todos aquellos que lo tenían sometido, y pensó en todos los esclavos y en especial en los adolescentes que estaban recluidos ahí y completamente indefensos al igual que él dentro del régimen de esclavitud tan severo en el cual los tenían, y que habían puesto sus esperanzas para poder vivir un poco mejor dentro de lo que fuera posible en el doblegarse y serviles no importando lo humillante que pudiera ser para ellos. Sonrió cansadamente y de repente sintió como las lágrimas empezaban a correr por sus mejillas hacia su mentón, en otras circunstancias se hubiera reprochado su falta de valor, pero en esos momentos se pudo dar el lujo de ser débil y dejar de luchar a pesar de que realmente era difícil aceptar eso, por otro lado sintió que le quitaban un gran peso de encima ya que a final de cuentas no tenía que tomar decisiones que afectaran a alguien más. Billy49mx@yahoo.com.mx